Fantasmagoría llega a 2023 con nueva imagen
Fantasmagoría nace como muestra audiovisual en 2018 con el tema de Temporada de brujas. Su nombre “Fantasmagoría” nace de las primeras proyecciones de cine realizadas con linternas mágicas como momento significativo en la historia del cine y esencial para el desarrollo del género de terror.
Lo fantasmal presente en el nombre de la marca está acompañando de “Las tres moiras” tomadas de la escultura “Las tres gracias” de Bernardo Vieco Ortíz del Museo Cementerio San Pedro en Medellín y elegidas como símbolo para resaltar la presencia de leyendas locales y la importancia de lo femenino en el género fantástico. Por esa misma razón el premio a mejor actriz se llama “Las tres moiras”
“El monumento en el Cementerio San Pedro llamado Las tres Marías, que en realidad son la representación de las tres virtudes teologales: fe, esperanza y caridad, en honor de una niña que murió a muy corta edad”
“Otra interpretación de algunos artistas es que representan tres momentos sicológicos o momentos de la vida: juventud, adultez y final de la vida porque tiene la flor marchita. Pero las personas que visitan el cementerio las conocen como las «Tres Marías» o las «Tres Ánimas».
Se dice que durante todo el año los visitantes les ponen flores o vasos con agua por la creencia de que las ánimas están sedientas. Hay quienes incluso, con el paso del tiempo, han creado mitos alrededor de las figuras asegurando que estas tres mujeres caminan en la noche haciendo la ronda en el cementerio y luego vuelven a su lugar.
Una pequeña evolución
En el 2018 cuando comienza el proyecto se planteó primero como una muestra de cine. Desde las primeras exploraciones de la imagen se tuvo en cuenta el contexto de la ciudad y la apuesta del genéro fantástico y de terror. En la primer imagen se hacía alusión al Teatro Junín y a fantasmas que lo invadían antes de su demolción en 1967.
En el 2019, que estuvo enfocado en Terror Gótico la ilustradora Fade Lasu creó un póster compuesto por una imagen icónica de la ciudad, Las Tres Moiras del Museo Cementerio San Pedro. Estas fueron tomando protagonismo en la esencia misma del festival y partiendo de ellas se fueron afinando la líneas temáticas del festival: fantástico, terror y ciencia ficción.
En el año 2020, en medio de la pandemia se buscó abstraer más la imagen para convertirla en un logotipo. Se simplificaron las formas y la composión, pero aún así se continuaba buscando afianzar elementos identitarios de la marca de Fantasmagoría.
En 2021, entran al equipo Carolina Rojas y Camila Puerta, que empiezan a trabajar en la marca y el diseño de las piezas del festival. En su investigación y análisis empiezan a ver las necesidades del festival y de cómo la marca se perdía en muchos elementos y ayudaron a plantear un nuevo camino de exploración. Esto lleva casi dos años hasta este 2023.
En 2023, con un trabajo en conjunto con las diseñadoras del festival y los fundadores del mismo se buscaron esos elementos claves que componen la esencia misma de Fantasmagoría. Con la creatividad y trabajo del diseñador Carlos Ortiz se llegó a una marca que resume de manera magistral lo que es el Festival. Se afianza la figura de las Tres Moiras, ahora con un elemento de la diosa Hécate (juventud, adultez y vejez). Con la simplifacición de las formas se convierte en un logo que puede estar en colores planos, colores y en alto contraste.
Otros elementos de la composición es el sol en parte superior de la imagen central y la luna en la parte inferior. Estos representan el pasado del tiempo y el pasado/futuro.
La decisión de los colores rojo, negro y amarillo al 10% está ligado a elementos de los tres géneros que son la base de Fantasmagoría: rojo (terror/horror), negro (fantástico) y amarillo espectral (ciencia ficción). La tipografía elegida fue la Bourbon que le da un toque de sello a toda la composición.
Una imagen que será nuestra nuestra marca a partir de este año y que esperamos nos acompañe por mucho tiempoy se afiance con el tiempo y sea reconocida por el público de Fantasmagoría.
Carlos Ortiz
Diseñador gráfico, ilustrador, director creativo y director de videos para la industria musical. Fanático de horror en todas sus manifestaciones artísticas. Ha sido profesor de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín en los énfasis de Imagen en Movimiento y Tipografía.